Todo lo que se mueve es un libro compuesto por imágenes, ensayos breves, recuerdos o entradas de diarios de viaje donde el nomadismo, el movimiento y el viaje transitan las páginas como actos políticos. Su autora nos transporta de unos rincones a otros en una red en la que el movimiento es el centro.
De forma análoga, Mata identifica sus textos como escrituras portátiles, fruto del desplazamiento en el que fueron redactados durante sus viajes. Así, el concepto atraviesa todo el libro y Valeria no sólo contempla el movimiento de animales, semillas e incluso piedras, sino que también aborda el tránsito del cuerpo, de la lengua, del turismo, de los aeropuertos o los libros como compañeros de viaje y difusores de historias dentro del devenir histórico.
La prosa de esta escritora mexicana destaca por la sencillez con la que nos transmite reflexiones de gran profundidad bajo un estilo elegante, junto con citas de autores como Deleuze y Guattari, Barthes o Sontag, deliciosamente enmarcadas dentro del movimiento que recorre cada fragmento. También encontramos el impacto de lo que se resiste al encierro en el diseño, en un artefacto blanco dispuesto a ser intervenido con nuestras huellas o un título en cubierta que parece querer invitarnos a agarrarlo, voltearlo, trasladarlo o engullirlo.
